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Hubo muy pocos Hotchkiss-Grégoire exportados a los Estados Unidos, y aún menos fueron cupés. Este automóvil exacto se exhibió en el Salón de Nueva York en 1953 y se vendió a Ed Cole, quien era el ingeniero jefe de Chevrolet en ese momento. Curiosamente, el volante presenta el logo de un Impala (cuya imagen y nombre aparecerían más tarde en un vehículo Chevrolet). Este cupé Hotchkiss ha sido completamente restaurado a su estado original. De los pocos Hotchkiss-Grégoires importados a los Estados Unidos, nuestra colección contiene tres.
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